Muchos asociamos el acudir con un nutricionista con dietas muy restrictivas y que solo es para las personas adultas que buscan bajar de peso.
Un especialista en nutrición va más allá de lo que muchos se imaginan.
El revisar nuestra composición corporal y el cómo se encuentra nuestra microbiota intestinal debe ser algo que todos conozcamos, sin importar el sexo y la edad.
Busquemos el generar el hábito de acudir con un especialista para cuidarnos y llevar un seguimiento con mejoras constantes.
¿Qué es la microbiota y por qué todos debemos prestarle la atención que se merece?
La microbiota intestinal juega un papel importante en nuestro organismo, ya que está compuesta por millones de hongos, bacterias, virus y otros microorganismos que habitan en la pared interna de nuestro intestino.
Es la encargada de realizar ciertas funciones vitales para nuestro organismo, tales como:
Fabricar vitaminas y otros elementos que nuestro organismo necesita para funcionar de manera adecuada. Es importante recalcar que sin la microbiota nuestro organismo no podría fabricar estas vitaminas y elementos por sí mismo.
Fortalece nuestro sistema inmune, aumentando nuestras defensas.
Trabaja con el sistema nervioso, separa sustancias que influyen en la actividad neuronal.
Evita que ingresen otros microorganismos malignos o con algunas patologías en nuestras paredes intestinales.
Una microbiota insana genera un daño muy notorio en nuestro organismo y bienestar. Algunos de los padecimientos más comunes derivados de una microbiota dañada son; obesidad, alergias, la aparición de tumores y algunos trastornos como lo es el autismo.
Por eso la importancia de atender a los pequeños de la casa.
El tener una buena nutrición desde la niñez permite que se consolide y se mantenga una microbiota diversificada y sana.
De esta forma, en la vida adulta se formarán y mantendrán hábitos saludables con mayor facilidad, trayendo como consecuencia una vida más alegre y saludable.
El cuidar tu microbiota no tiene que ser muy complicado, a continuación te doy algunos consejos que puedes llevar a cabo para mantener y cuidar a tu microbiota de la mejor forma.
Aumenta tu consumo de frutas y verduras, prioriza los alimentos de color verde como las espinacas, lechugas, brócoli y alcachofas.
Deja de consumir alimentos procesados y con exceso de azúcares.
Los probióticos son esenciales para tener una microbiota saludable, estos los encuentras en algunos alimentos, o si es necesario puedes tomar suplementos siempre y cuando sea con la autorización de un especialista, para determinar una dosis adecuada.
Descansa el tiempo necesario, muchas veces por nuestro trabajo, hijos o labores domésticas, no le damos el descanso necesario a nuestro cuerpo. El descansar y dormir bien es de suma importancia para mantener una buena salud en general.
Acude con un especialista para mejorar la salud nutricional de tus pequeños. Es esencial que te cuides y cuides a los tuyos mediante una alimentación balanceada.
Comienza desde hoy.
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