Los probióticos son parte fundamental de nuestra salud y balance del metabolismo. Los podemos consumir en alimentos como el yogurt, la kombucha o el kéfir, o también como suplementos.
Es muy importante entender que no todos los probióticos son iguales, y que no podemos hablar de que un probiótico funciona para todo.
Cada familia de probióticos tiene indicaciones muy específicas y por eso es muy importante que no te los recetes o autorrecomiendes, tampoco es bueno iniciar el consumo de probióticos porque te los vende alguna amiga o vecina o un grupo en redes sociales.
Lo ideal es hacer un diagnóstico integral de tu salud para saber tus necesidades. Estas bacterias que viven con nosotros necesitan no solamente llegar, es decir, no es suficiente con que tomes probióticos, además es importante tener una alimentación rica en prebióticos, simbióticos e incluso postbióticos.
Sí, suena complicado, pero vamos a ir explicando cada uno de estos términos para que puedas entenderlos mejor y favorecer la salud tanto tuya como de tu familia.
¿Qué necesitas saber de los probióticos?
Depende del tipo de probiótico y de sus características se dan las indicaciones de cómo consumirlos, algunos es mejor tomarlos en ayunas, otros, junto con los alimentos.
Depende de tu estado de salud se te indica una familia específica de probióticos, hay algunos que ayudan a metabolizar mejor la grasa corporal, otros que nos ayudan al mejor metabolismo del colesterol, otros indicados para enfermedades neurológicas, otros para diabetes y resistencia a la insulina, etc.
No es suficiente el que un probiótico contenga X cantidad de millones de cultivos activos, hay que recetar el que tu organismo necesita.
De nada te sirve tomar probióticos si tu alimentación no está bien balanceada.
El tomar probióticos no es sinónimo de una vida sana, es necesario complementarlo con una buena alimentación, ejercicio y un patrón saludable de sueño reparador.
Se utilizan para mejorar la salud de tu microbiota intestinal (antes conocida como flora intestinal).
¿Qué afecta la salud de mi microbiota intestinal?
- El estrés, la contaminación, la mala alimentación, la falta de sueño reparador, la falta de ejercicio, consumir antibióticos o antiparasitarios, el consumo de bebidas azucaradas (refrescos, jugos, frappés, etc.), el consumo de glutamato monosódico, consumo de colorantes artificiales, saborizantes artificiales y edulcorantes artificiales, entre otros.
Los probióticos son excelentes para la salud, ¿te gustaría conocer sus beneficios?
· Pueden ayudar a aumentar la inmunidad al mantener a raya a los patógenos dañinos.
· Ayudan con las alergias y el asma (al evitar que se absorban los alérgenos).
· Reducen los niveles de colesterol.
· Ayudan a procesar la lactosa.
· Cambian tu estado de ánimo durante tu día.
· Producen vitaminas.
· Aumentan tus niveles en antioxidantes.
· Mejoran las condiciones como el autismo.
· Combaten la obesidad y diabetes.
· Apoyan a tu organismo con la absorción de nutrientes.
· Mejoran tu salud intestinal y sus padecimientos.
Ojo, no es para todos.
Existen algunos riesgos asociados al consumo de probióticos. Las personas con un sistema inmunitario debilitado pueden experimentar un aumento de las infecciones o de la diarrea al tomar probióticos.
Es importante acudir a tu médico antes de tomarlos si toma algún medicamento o padece ciertas enfermedades como la diabetes o el cáncer, ya que pueden interactuar con estos medicamentos o hacerlos menos eficaces.
Recordemos que el llevar un seguimiento es esencial, de esta manera verás como han sido tus avances y en que otras cosas puedes mejorar, inclusive cambiar.
Te invitó a cuidarte desde el día de hoy, no pierdas más tiempo y comienza a invertir en tu organismo.
¿Tienes alguna pregunta? Contáctame y con gusto platicamos.
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